Delineados tus mandalas como el territorio encantado de un conjuro, como ciclos eternos, como los de la naturaleza...
Como un halo luz castaño alrededor de un eclipse, se definen en círculos perfectos, los macromundos de tus iris. Formas conocidas se enredan, siluetas de seres errantes y objetos inertes están dibujados en ese espacio cálido y profano...
Y con la profundidad de un abismo, se abren en rituales mágicos las pupilas de tu micromundo. Tu yo más íntimo, no está en tu pecho, se pierde en el espacio sacro de tus ojos... Tus sentires son círculos concéntricos pero tus deseos dan vueltas en una espira infinita e incontrolable, que me atrae... que me lleva... que me deja en transe cada vez que me miras...
1 comentario:
Sólo puedo agregar un beso silencioso...
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